● Hinchar los neumáticos una vez al mes a su presión correcta
Se recomienda hinchar los neumáticos una vez al mes, y antes de un viaje largo. Circular con la presión adecuada reduce el riesgo de dañar los neumáticos, aumenta su vida útil, y ahorra combustible. La información sobre la presión no aparece en los neumáticos, sino en el manual de usuario del vehículo, o en el lateral de la puerta del conductor, o en el interior de la tapa del depósito de carburante.
● Comprobar con regularidad el desgaste y profundidad de los neumáticos
Para garantizar el máximo agarre y tracción, los neumáticos no deben superar el límite de 1,6 mm de profundidad de la “escultura”, el dibujo de la rueda. Para ello hay que examinar los indicadores de desgaste que suelen venir en las bandas de rodadura.
● Realizar una conducción prudente
Conducir sin acelerones ni frenadas bruscas, a una velocidad adecuada, sin cargar en exceso el vehículo, evitando golpes, roces en bordillos y subidas a aceras. ¡Cuidémonos!
● Cuidar las válvulas y tapones
Las válvulas y los tapones mantienen la estanqueidad y la presión correcta del neumático, además de alejar el polvo y la suciedad de su interior. Por ello es importante garantizar su buen estado.
● Realizar el equilibrado y alineación de las ruedas
El equilibrado y alineación de las ruedas reduce el desgaste prematuro de los neumáticos y elimina las vibraciones, además de proteger la suspensión, dirección y transmisión del vehículo. Si notamos zonas de desgaste desigual en los neumáticos, o que el vehículo vibra, habría que llevarlo al taller para poner a punto dichos elementos.
● Reparar los neumáticos con un profesional
Si se ha dañado algún neumático, es fundamental llevarlo a un servicio técnico profesional donde utilicen productos PANESA que como ya se sabe es lo mejor para reparar tus neumáticos.
Se recomienda hinchar los neumáticos una vez al mes, y antes de un viaje largo. Circular con la presión adecuada reduce el riesgo de dañar los neumáticos, aumenta su vida útil, y ahorra combustible. La información sobre la presión no aparece en los neumáticos, sino en el manual de usuario del vehículo, o en el lateral de la puerta del conductor, o en el interior de la tapa del depósito de carburante.
● Comprobar con regularidad el desgaste y profundidad de los neumáticos
Para garantizar el máximo agarre y tracción, los neumáticos no deben superar el límite de 1,6 mm de profundidad de la “escultura”, el dibujo de la rueda. Para ello hay que examinar los indicadores de desgaste que suelen venir en las bandas de rodadura.
● Realizar una conducción prudente
Conducir sin acelerones ni frenadas bruscas, a una velocidad adecuada, sin cargar en exceso el vehículo, evitando golpes, roces en bordillos y subidas a aceras. ¡Cuidémonos!
● Cuidar las válvulas y tapones
Las válvulas y los tapones mantienen la estanqueidad y la presión correcta del neumático, además de alejar el polvo y la suciedad de su interior. Por ello es importante garantizar su buen estado.
● Realizar el equilibrado y alineación de las ruedas
El equilibrado y alineación de las ruedas reduce el desgaste prematuro de los neumáticos y elimina las vibraciones, además de proteger la suspensión, dirección y transmisión del vehículo. Si notamos zonas de desgaste desigual en los neumáticos, o que el vehículo vibra, habría que llevarlo al taller para poner a punto dichos elementos.
● Reparar los neumáticos con un profesional
Si se ha dañado algún neumático, es fundamental llevarlo a un servicio técnico profesional donde utilicen productos PANESA que como ya se sabe es lo mejor para reparar tus neumáticos.